jueves, 20 de enero de 2011

Ahora

Es un total de fantasías, un regadero de cristos, de mitologías, de historia perdida, de risas rancias, de latidos muertos, de lluvias frías, de miradas paralelas desencontradas, de abismos devorados por abismos en galaxias diferentes, en diferentes tiempos, con diferente gente.
Todavía te creo y vuelvo a ser un niño.
Esperanza seca y estampada en un libro ya leído mas de mil veces.
Y mi ventana abierta, esperando que entres de nuevo a mi vida, te disculpes y me mates.

2 comentarios:

santiago san martín dijo...

está bueno eso de que apesar de todas esas cosas que nombraste y las que preferiste callar, sigas con la ventana abierta. supongo que siempre deberían estar abiertas las ventanas, y siempre tendriamos que caer en el "todavía te creo".
te mando un abrazo!

Sebastián dijo...

Gracias capo por el comentario.
Y si, yo soy un chabon bastante optimista, el problema es cuando le abrís la ventana a personas que no merecen mas oportunidades. Que jugaron todas las cartas.
Pero bueno, las cosas se dan así.
Otro abrazo para vos ;)