domingo, 23 de noviembre de 2008

Sueño del Centauro




[Una corbata que ahorca], te estira la piel, te arranca la lluvia de los ojos.
[Una escopeta que apunta] , te amarra a la pluma, escribe tu piel frente a todos.
[Un destino que nos sacan] a mansalva, a la suerte, al impulso.

[Una mano que acerca amistad], abandonas el hueco negro, respiras luz.
[Una palabra que te abraza], un viento que limpia heridas, un reposo del rataplan.
[Un halago al ideal], un beso en la mejilla, un mirar de cielos nítidos

[Una pósima encantada], racimos de besos, aromas de antes, olor a aquello
[Una bala en la corniza], un hechizo en los ojos, nuestras calles, sonidos sordos
[Un golpe palpitante], para que caiga la bestia, el ego del corazón, sueño del centauro.

jueves, 20 de noviembre de 2008

Ayer de Cielo Gris



Es confusa mi vision
aún si el día es despejado
de vivir por la pasión
cuando el camino está infectado

Las baldozas están flojas
no confío en su sustento
cada vez que miro atras
nadie me va siguiendo

El aire se hace denso
el fracaso se aproxima
y las lágrimas que caen
son el nectar de tu rima

Mi ayer de cielo gris
lastimado por amar
mi presente empedrado
dolido por recordar

La ventana en el túnel
tus melodías en mi tren
mi bandera sin colores
esperando tu pincel

Mi esperanza inocente
la nostalgia de tus cosas
yo te amarraré a mis manos
no te escapes mariposa

En mis sueños te convoco
una y otra vez en vano
y al verme debastado
me hace sentir mas humano

miércoles, 5 de noviembre de 2008

La Risa de las Brujas

[Harto de esperar
de cortar el cordón umbilical
apto de saber la verdad
dejar de huir del que vendrá]

Antes de irritarme
de fastidio y de rutina
alto vuelo, lejos de estos actos
que se suceden en mi vida

Son constantes las mentiras
miserables con sus risas
y mas no es una que sonríe
son como diez mas las vecinas

Se atolondran con maldad
y golpean con su paladar
el rencor las hace odiarse
a ellas y a los demás.

Pero me mantengo sordo
ante la chuzma agresiva
que cuestiona con soberbia
con el ego a la deriva.

Y aunque me rebaje un poco
las ignoraré con vehemencia
perderán mi palabra
y también mi presencia.